Uno de los lugares a los que todos los niños recuerdan haber ido por primera vez cuando eran más pequeños es el zoo.
Los distintos animales del zoo maravillan a los niños.
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Aunque la mayoría de los animales son simpáticos y tranquilos cuando los niños y las familias pasan a verlos, también hay casos en los que estos animales se convierten en ejemplos inadecuados de los que los niños pequeños pueden sacar ideas.
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En un zoo de Londres, cinco loros fueron retirados de la vista de los invitados por decir palabrotas.
Sí, has leído bien.
Estos cinco loros se insultan como si no hubiera un mañana y se están convirtiendo en un mal ejemplo para los niños pequeños que pasan por allí.
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Al principio, los loros que hablan son monos y adorables.
Decir palabrotas también puede ser entretenido, pero normalmente los pájaros sólo lo hacen durante unos instantes.
Lo que antes era simpático y divertido se convirtió en una guerra sin cuartel entre pájaros malhablados.
Escuchar a los pájaros hablar como humanos puede ser una experiencia muy divertida, sobre todo para los niños pequeños que aún no saben que los loros también pueden hablar si se les entrena adecuadamente.
Pero cuando estos pájaros empezaron a hablar mal a los invitados, dejaron de ser tan monos.
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A algunas personas les hace gracia oír palabrotas de los pájaros, pero esto definitivamente no es nada bueno cuando se trata de huéspedes jóvenes.
¿Cómo ha manejado el zoo el jaleo?
El parque tomó medidas y retiró los cinco loros grises africanos de la vista del público.
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Tras una evaluación y para evitar que los padres tuvieran que revertir los efectos del exceso de palabrotas que escuchaban, el parque de vida salvaje decidió finalmente separar a las aves entre sí y retirarlas también de la exhibición pública.
Al parecer, los loros se excitan mutuamente, por lo que la dirección colocó a las aves en zonas distintas del parque para que no tuvieran que verse y empezaran a maldecir a rabiar de nuevo.
Los cinco loros no siempre fueron así.
Billy, Eric, Jade, Elsie y Tyson llegaron al Lincolnshire Wildlife Centre y se unieron a su colonia de 200 loros grises en agosto de 2020.
Muy pronto mostraron su afición por hablar la lengua no tan buena.
“Estamos bastante acostumbrados a que los loros digan palabrotas, pero nunca habíamos tenido cinco al mismo tiempo”, compartió el director ejecutivo del zoo, Steve Nichols. “La mayoría de los loros se callan fuera, pero por alguna razón estos cinco lo saborean”
Aunque los visitantes no se quejaron, la dirección decidió retirarlos de la exhibición pública para evitar que los niños aprendieran malas palabras.
“Cuando un loro te dice ‘vete a la mierda’ divierte mucho a la gente”, dijo Steve. “Ha sacado una gran sonrisa a un año muy duro”
Los pájaros fueron trasladados a colonias diferentes, y Steve tiene la esperanza de que aprendan a hablar un lenguaje mejor que maldecir a los demás.
“Espero que aprendan palabras diferentes dentro de las colonias, pero si enseñan a los demás palabras malsonantes y acabo con 250 pájaros que dicen palabrotas, no sé qué haremos”, añade.
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